Ana Cuervas
Proveniente de una tierra que sigue luchando por respirar unos Buenos Aires, decidió partir en busca de nuevos horizontes. Saltando el charco con 24 años y con muchas ganas de viajar llegó a Bilbao, descubriendo que todo lo aprendido en las escuelas de circo de su ciudad natal le abriría una gran puerta a lo que había soñado alguna vez: ser artista de circo (y vivir de ello).
Gracias a las enseñanzas de sus mejores maestros en Buenos Aires como Marcelo Gómez, Laura Sabán, Juana Beltrán, Alan Lerch… descubrió su disciplina, su filosofía de vida: las verticales, equilibrios sobre manos, en alturas. También aprendió junto a Mariano Pujal y Martin Carela el mundo de las acrobacias portés. En el clown se bautizo con Lila Monti y trabajo mucho años recibiendo formación con Walter Velázquez.
Su formación siguió creciendo en el circo contemporáneo gracias a proyectos transfronterizos entre Euskadi, Catalunya y Francia. Recibiendo formación durante tres años de artistas como Rob Tanyen, Pascal Angelier, Enric Petit, Marcal Calvet, Ignacio Herrero, Pau Portabella y Marta Torrens. Independientemente seguía navegando el viaje del clown y el teatro físico recibiendo monográficos con Jesús Jara, José Pirs y a su vez descubriendo la danza de la mano de Begoña Crego, Victoria Mujica y Amaia Pascual.
Trabajando más de 15 años en la docencia impartiendo clases de circo integral en la asociación de circo Koblakari, Zirkozaurre en Bilbao, Circonove en Galicia como monográficos de verticales hasta el día de hoy.
En los últimos años creó Rojo Telón dándole la importancia a las mujeres de hoy en el circo, enraizada entre País Vasco y Galicia.
Actualmente forma la compañía A Vela un proyecto de circo revolucionario disfrutando del absurdo y el caos de nuestros tiempos.